14 de septiembre de 2009

La crítica destructiva: Big

Tómpiesa con un niño al que ener colegio le hasen bulling, le dan de cates…etc. Sus compañeros se meten mucho con él; pero… con to lo carajote que es, con las dosoreja que tiene, la cara to llena de peca y más bajito quer carajo …¿no es pa meterse?

El chavá está to agobiao porque na má que quiere ir con los mayores y estos nada ma que hasen putearlo. Tiene un colega que es iguá de feo o más pero es consciente de la edad que tiene y se jode. Er niño está to amargao y na má que quiere ser grande. Es carne de cañón, si llega a pasarle ahora, fijo que es de los que se gastan la pasta en to los anuncios esos de alargamiento de penes…etc.

Totá, un día, amargao der tó, está dando un vuertaso por la feria de san fernando y se mete en la zona de los cacharrito, en la calle del infierno vamo… allí se encuentra la típica máquina esta que es pa darle coba a la gente y sacarle los cuartos. La del oráculo. Es como un confesionario pero pagando; -así se acostumbra la gente a pagar por sus pecados y sus deseos…-me dijo el picaito que tenía sentao al lao en el cine. Hay un muñeco de un genio de la lámpara dentro de una urna, echas un euro y le dices tu deseo. Entonces te devuelve una tarjetita donde te pone si se va a conceder o no. Al nota le sale la tarjetita diciendo que “sí” pero se da cuenta de que la lámpara del genio está desenshufá y dise er niño: qué cosa más rara carajo… (es que er niño tiene una boca…)

Aquí es donde le digo ar picaito de al lao: vaya tela, fomentando la ludopatía entre los jóvene. No me extraña que la bruja Lola se haya forrao.

Er niñato se va pa su casa más amargao que ante porque sigue iguá de shico y con un euro meno ener borsillo. Sacuesta y ahora viene er rollaso de la película: cuando le suena el despertadó pa í ar colegio, se levantá to dormío se va par cuarto de baño a meá y se dá cuenta de que se la puesto el nabo como una barra de pan. Se asusta y al mirarse al espejo no se reconoce; se vé como si tuviera 30 año y con tó la cara de tom jank.

-También es mala suerte, -me dise er picaito, -ya podía tené la polla iguá de grande pero con la cara de brad pít y no del carajote ese…

Esta es la parte de la película que es un descaro y que los guionistas no supieron justificá, porque el niño dijo que quería ser big, que es grande en inglé, y no mayor. O sea, que el chavá lo que quería era seguir siendo un niño de trece año pero medí uno oshenta y tené la polla como la pata de un paso… en fin.

El asunto es que el nota se acojona, se pone ropa der padre y se va de la casa por pata. Se va al cortinglé y se pone a tocarlo tó, pero como es un pureta y no un niño, los de la shaquetita roja no le disen ná. En una de estas se pone a jugá con un piano que se toca con los pié y lo ven los de la tienda y lo fichan pa trabajá allí…-ji ome, -le dije al picaito, -yo llevo to la vida tocándolo tó ener cortinglé y a mí toavía nadie me ha ofresío un trabajo…

Le dan un puestaso der carajo de diseñadó y probadó de juguete y a los dos día ya sa comprao un loft…por los cojone.

Una compañera del curro le tira los tejo y él se la tira. Se la lleva al loft a jugá al pinbal, a la cama elástica y al aquí te pillo aquí te mato.

La piva es una convenía que dise que está tó enamorá y el empiesa a agobiarse. Ella está tor día diciéndole: ¿qué te pasa?...y él respondiendo: ná. Vamo, como to las pareja. Decide buscar al amigo feo y contarle quien es. Le cuenta lo del deseo que pidió en la máquina del oráculo y que estaba desenchufá. El amigo se quea flipao y le pregunta:

-¿cómo era la máquina esa?. El tonjak dise: -era una especie de vitrina de cristal y dentro había un moro sentao que le echabas un euro y te concedía el deseo… el feo responde: -¿tú está seguro que era la máquina del oráculo?...¿no sería el taquillero del látigo que te dio coba? A partir de ahí el tonjank y el feo se van de juerga to los día. Despué pasa lo de siempre, la piva convenía lo quiere na má que pa ella y no lo deja í con el feo. El feo se coge un rebote que no vea y los manda a los dos al carajo.

A los tre o cuatro día, el feo llega con un papelito que ha arrancao de la guía y me dise el picaito de al lao: -hay que ver que los yanki siempre salen destrosando las guía de teléfono…¿no podían apuntá el número en una servilleta o en er móvil como tor mundo carajo?... En el papelito viene el teléfono del feriante, lo llaman y les dice donde está la puta máquina del oráculo. El big se va con el colega y vuelve a gastarse un euro en la maquinita… -se empiesa así y se acaba ener bingo…me dise er picaito. Aquí ya no se ve lo que le pide a la maquinita. Seguramente porque si le dise little o small (shico), lo hubiera convertío en un enano y ademá, porque ni en inglé ni en español hay una palabra que signifique: quiero ser iguá que ante pero con el mismo nabo de ahora. Totá, que echa el euro, pide el deseo y se va con la convenía. El big se lo cuenta tó a la piva pero ella no se lo cree y se jarta de llorá. Cuando él se baja der coshe de la convenñia y se va pa casa la mare se transforma en niño. Ella está llorando y mira por el retrovisó viéndolo en mitá la calle con la ropa to grande y piensa: po mira quer niño es feo. La película no tiene un final feliz por tres motivos:

1º Porque el niño vuelve a sé iguá de chico y de feo y a tené la picha de un niño.

2º Porque la pederasta convenía se vuelve a quedá sola.

3º Porque la mare se lleva un disgusto del carajo al pensá que se había librao der niño y éste vuelve a casa los pare a seguí viviendo del cuento; pero eso sí, ademá con la hipoteca del loft.


En fin, otra pasta gastá en una película americana de mierda. Menos mal que yo me las bajo de Internet…

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