Hay veces que no pienso pero digo,
y es justo tras decirlo cuando pienso,
“he vuelto a abrir la boca sin consenso,
mutando a los votantes en testigos”.
“¡Cuidado con las formas!, viejo amigo”,
me digo sin pensarlo frente al censo,
y como a no escucharme soy propenso,
en cuanto acaba el mitin me maldigo:
“¡No lo pienses!, ¡no escuches!, ¡no te digas!…
si al cabo ya nos vamos conociendo,
¿quién va a esperar de ti que te desdigas?”…
Promete lo que sea, pero hazlo sonriendo,
¡promesa de campaña nunca obliga!”…
¿Qué acabo de decirme?... yo me entiendo…
A las más grandes bocas del reino: Pons, Blanco, Mato, Bono, Durán i Espe.
Sin cariño.
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